Nuestra tarea de conservación en la Laguna Ojo de Liebre comenzó hace más de 20 años. Se trata de un sitio natural de enorme extensión, con un complejo lagunar superior a las 163 000 hectáreas que reúne varias características de interés ecológico. Una de ellas es la visita anual de unos 20 mil ejemplares de ballena gris (Eschrichtius robustus) que cada año migran desde el Ártico para tener aquí a sus crías.
La Laguna Ojo de Liebre es uno de los tres grandes santuarios que reciben la migración anual de estos cetáceos, junto con Laguna San Ignacio y Bahía Magdalena. Tras viajar en grupo durante meses a lo largo de 12 mil kilómetros, las ballenas encuentran en las aguas templadas de Baja California un sitio seguro para criar a sus ballenatos, que nacen midiendo unos 4.5 metros de largo, con media tonelada de peso.
La presencia de la ballena gris motivó al gobierno de México a preservar legalmente los sitios de crianza. De ahí que en 1972 se decretó como santuario a la Laguna Ojo de Liebre. En el año 2004 pasó a integrar la lista de Sitios Ramsar que cataloga a los humedales de importancia internacional.
Por otro lado, este vasto complejo lagunar recibe anualmente más de 250 000 aves playeras. Como Pronatura Noroeste, llevamos a cabo tareas de monitoreo de aves en los humedales de Guerrero Negro-Laguna Ojo de Liebre, para conocer el estatus poblacional de especies como el playero rojizo (Calidris canutus), el picopando canelo (Limosa fedoa) y el costurero pico corto (Limnodromus griseus). Realizamos el marcado de aves con banderas para conocer su conectividad migratoria, en colaboración con diversas organizaciones. También llevamos a cabo el marcado de aves con radiotransmisores, biologgers y el uso de estaciones Motus para conocer los desplazamientos de las aves en detalle.
Además de la labor de monitoreo, nuestros expertos realizan tareas de concientización social para lograr un cambio de comportamiento en los pobladores locales. Esto incluye campañas relacionada con el manejo de residuos de los habitantes de Guerrero Negro, sobre todo en los alrededores del Refugio de aves playeras El Vizcaíno.
Por otro lado, Pronatura Noroeste es pionera en estudiar los inminentes efectos del cambio climático en los ecosistemas costeros de Guerrero Negro. Por ejemplo, el sutil aumento del nivel del mar a consecuencia del calentamiento global amenaza con inundar las zonas costeras de la laguna, donde miles de aves playeras pasan el invierno. Con esta información, Pronatura Noroeste desarrolla nuevas estrategias para aumentar la resiliencia de estos ecosistemas costeros para el beneficio de las aves y las personas.
Además de la Universidad de Cornell, también colaboran en el desarrollo del Plan Maestro la Universidad Autónoma de Baja California (UABC), la Universidad Autónoma de Baja California Sur (UABCS), la Universidad de Massuchsetts, la Reserva de la Biósfera El Vizcaíno, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) y la empresa Exportadora de Sal.
Son muchas las acciones necesarias para conservar los ecosistemas y especies en Laguna Ojo de Liebre. Únete a este esfuerzo y sé parte de esta hermosa historia ambiental.
