Los mares no se contaminan solos. Cada botella de plástico, cada tapa y cada envoltura de celofán que vemos en la playa, flotando a la deriva o en el fondo del océano, provienen de una persona, de un hogar, de un comercio o de una empresa que los desechó de forma irresponsable. Se estima que cada año se producen unas 500 mil millones de nuevas botellas de plástico, muchas de las cuales terminan en vertederos sin una disposición ni tratamiento de residuos adecuado. La naturaleza es sabia en sus procesos, sin embargo, no está preparada para integrar el material sintético a los ciclos de la vida orgánica. Esas botellas, envolturas y tapas, junto con miles de toneladas de material disperso, permanecerán como desechos contaminantes durante siglos (incluso milenios, según el material).
Reducir el uso indiscriminado de plásticos de un solo uso y material sintético en nuestra vida es tan importante como la limpieza de los ecosistemas. En Pronatura Noroeste mantenemos por más de 30 años el compromiso por la limpieza y conservación de las costas, mares y océanos. Este mes de septiembre tenemos la oportunidad de hacer visible este compromiso, al participar en una jornada internacional de limpieza en el Golfo de Santa Clara en Sonora, La Odisea en el Valle de San Quintín y el Parque Estatal Arroyo San Miguel en Ensenada, Baja California.
En la jornada también colaboran organizaciones de la sociedad civil, los gobiernos municipales, algunos centros educativos y la propia comunidad. El impacto de esta jornada será no sólo local sino también global, pues forma parte de la estrategia Limpieza Internacional Costera que impulsa la organización Ocean Conservancy en más de 60 países. Una característica de esta jornada es que se llevará a cabo la clasificación y el conteo de residuos, para generar información útil sobre el tipo de desechos artificiales que se encuentran en cada sitio para establecer estrategias de prevención.
De igual manera, esta importante labor de conservación se vincula con la campaña “Mares limpios” del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, de la cual formamos parte desde el pasado julio”. En particular reviste interés la jornada de limpieza en el Parque Estatal Arroyo San Miguel, al norte de Ensenada, a llevarse a cabo el sábado 24 de septiembre. Esto se debe a que se ha cumplido el primer año del decreto por el que el Arroyo San Miguel adquirió el estatus de parque estatal, para la protección legal de 67 hectáreas de paisaje costero.
Para este evento, contaremos con la colaboración del Departamento de Ecología del municipio de Ensenada, estudiantes de la Facultad de Ciencias Administrativas y Sociales de la Universidad Autónoma de Baja California (UABC), el grupo Unidos por Ensenada, el Instituto Tecnológico de Ensenada del TecNM, el Despacho de Arquitectos SLAP, surfistas de Península Longboard & Film, así como residentes de San Miguel y personas voluntarias.
A la par, la agrupación de buceo Cuidemos el Océano, emprenderá una limpieza subacuática en Puerto Arbolitos campo # 6 las costas de Ensenada. Cabe mencionar que como parte de esta Alianza de organizaciones el pasado sábado 17 de septiembre, este grupo recolectó del arroyo El Gallo 200 kg de fierro, 594 kg de alfombras y textiles, 1384 kg de plástico, 181 kg de vidrio y 1188 kg de llantas con la intención de evitar que estos desechos lleguen al mar.
El mismo sábado 24 de septiembre en la playa de San Miguel, se celebrará un torneo internacional de surf liderado por Península Longboard & Film, para regocijo de los amantes de este deporte, y de los visitantes asiduos a esta playa, considerada la cuna del surf en México. Además para los asistentes, habrá libros de regalo donados por el Instituto Tecnológico de Ensenada del TecNM y tendremos actividades educativas y recreativas para los infantes y las familias que nos visiten.
Únete a esta brigada y sé parte del cambio, para que cada botella, cada contenedor y cada envoltura que hoy contaminan el Parque Estatal Arroyo San Miguel, sean removidos del ecosistema y preservemos un espacio al aire libre digno para nuestras familias.