Observar una vaquita marina en el Alto Golfo de California es tan complicado como buscar una aguja en un pajar. Muchos factores deben alinearse para conseguirlo: un mapa acústico actualizado, un ojo entrenado, equipo de monitoreo especializado, una embarcación dedicada exclusivamente a dicha misión, buen clima, y sí, algo de suerte. Por ello, compartir este video registrado durante el último crucero de avistamiento de 2024, nos recuerda que la especie resiste en su hábitat, que aún hay esperanza para alejarla de la extinción.
La vaquita marina (Phocoena sinus), endémica del Alto Golfo de California, es el cetáceo en mayor peligro de extinción del mundo. Si bien en México cuenta con el máximo nivel de protección legal dentro de la NOM-059, sumado a estar incluida en la Lista Roja de Especies Amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN, por sus siglas en inglés) y contar con el respaldo internacional de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES, por sus siglas en inglés), el hábitat de la marsopa mexicana no ha logrado liberarse de las artes de pesca ilegales que han causado un declive dramática de su población.
Sobre cómo alejarla del fatal escenario, el acuerdo internacional es unánime: todo esfuerzo depende de bajar a cero el número de enmallamientos de marsopas. Para lograrlo, existe un formidable esfuerzo colaborativo en el que participan el gobierno de México, a través de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) y la Secretaría de Marina, además de las organizaciones civiles Sea Shepherd Conservation Society, Cetáceos, Acción y Transformación, Pesca ABC y Pronatura Noroeste. También se suma el respaldo activo de ReWild y del actor estadounidense Leonardo Di Caprio, quienes apoyan a que el reflector internacional se mantenga fijo sobre la realidad de la especie amenazada.
Video de vaquitas durante el crucero de avistamiento 2024:
Pronatura Noroeste, en conjunto con la Reserva de la Biosfera Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado, cooperamos directamente con los pescadores de San Felipe, Baja California, y Golfo de Santa Clara, Sonora, hacia la transición de artes de pesca amigables con la vaquita marina. Conscientes de que el mejor escenario para la conservación de la especie depende de la participación activa de los pescadores, avanzamos en el fortalecimiento de tecnologías que den viabilidad a un esfuerzo pesquero sostenible capaz de garantizar, a la par, mayores ingresos para los pescadores y la supervivencia del cetáceo mexicano.
Otros pasos positivos que se efectúan para salvar a la vaquita marina incluyen la red de monitoreo acústico, la medición del ADN ambiental, la ampliación del polígono de protección del hábitat y la formación de jóvenes locales en labores de monitoreo.
Este último video que les compartimos, sin duda, es el mejor obtenido de la especie en su hábitat hasta el momento. Nos entusiasma al verlo, como seguro a ti también. Es cierto que la situación se mantiene grave para la vaquita marina, pero también es real que el esfuerzo de muchos se mantendrá hasta que la población de la especie regrese a números saludables.